Elon Musk llama "imbécil" a Peter Navarro, principal asesor comercial de Trump en medio de medidas arancelarias

El martes, Elon Musk arremetió contra Peter Navarro, principal asesor comercial del presidente Donald Trump, a quien describió con términos despectivos como "Peter Retarrdo", "imbécil" y "más tonto que un saco de ladrillos", intensificando así las tensiones entre ambos, aliados del expresidente, a raíz de las políticas arancelarias implementadas por su administración.

La confrontación entre Musk y Navarro sigue vigente después de que, en una entrevista con NBC News, Navarro afirmara que tanto en la Casa Blanca como entre la población estadounidense se entiende que Elon Musk no es "un fabricante de coches", sino "un ensamblador".

Según CBS News, el enfrentamiento comenzó cuando, en una entrevista el lunes en CNBC, a Peter Navarro, un firme defensor de los aranceles, le preguntaron sobre el aparente escepticismo de Elon Musk respecto a estas medidas. Navarro, quien es asesor principal de comercio y manufactura del presidente Donald Trump, sugirió que el apoyo de Musk al libre comercio respondía a su interés en obtener "piezas extranjeras baratas" para Tesla.

Además, afirmó que Musk "no es un fabricante de automóviles, sino un ensamblador en muchos casos", abasteciéndose de componentes de otros países, a pesar de que Tesla tiene varias plantas de ensamblaje en Estados Unidos.

Musk respondió al día siguiente con una serie de publicaciones en X, llenas de insultos, llamando repetidamente a Navarro "Retardo", tildándolo de "imbécil" y "peligrosamente tonto". El multimillonario refutó las afirmaciones de Navarro sobre su compañía, citando un estudio de Cars.com que muestra que el Model Y de Tesla tiene más componentes fabricados en Estados Unidos que cualquier otro automóvil. Además, Musk instó a Navarro a "preguntarle al falso experto que inventó, Ron Vara", un nombre ficticio que es un anagrama de Navarro y que aparece en varios de sus libros.

El martes, la Casa Blanca minimizó la disputa, y la secretaria de prensa Karoline Leavitt comentó: "Los chicos son chicos y permitiremos que sus enfrentamientos públicos continúen". Reconoció que Musk y Navarro tienen "puntos de vista muy diferentes sobre el comercio y los aranceles".

Este intercambio de opiniones se produjo después de que Musk pareciera criticar a Navarro el sábado, respondiendo a un video en el que el asesor defendía los aranceles, calificando el doctorado de Harvard de Navarro de "algo malo, no bueno". Además, Musk expresó en un evento el sábado su deseo de una "situación sin aranceles" entre Estados Unidos y Europa. En una entrevista con Fox News, Navarro respondió que Musk "simplemente protege sus propios intereses como lo haría cualquier empresario".

Según CBS News, la disputa entre Musk y Navarro se da menos de una semana después de que Trump anunciara aranceles del 10% contra casi todos los países, además de aranceles más altos para varios socios comerciales, como la Unión Europea, China y Vietnam. El presidente justifica estas medidas como necesarias para reducir el déficit comercial de Estados Unidos y combatir lo que considera prácticas comerciales desleales.

Sin embargo, los mercados reaccionaron negativamente ante las advertencias de economistas que advierten que los aranceles podrían frenar el crecimiento económico y aumentar los precios para los consumidores.

Las acciones subieron el martes por la mañana debido al optimismo de que la administración Trump podría llegar a acuerdos con sus socios comerciales y suspender los aranceles, pero luego cayeron y cerraron en negativo. Trump ha mantenido su postura firme, imponiendo aranceles adicionales a China tras las represalias de este país, elevando el arancel total a las importaciones provenientes de China al 104% a partir del miércoles.

Algunos miembros de ambos partidos han expresado dudas sobre los aranceles. Demócratas y algunos republicanos han apoyado una legislación para reafirmar la autoridad del Congreso sobre la imposición de aranceles, aunque incluso si se aprobara un proyecto de ley que limitara el control del presidente, sería difícil reunir suficiente apoyo republicano para superar un posible veto de Trump.