Gabriel Costa sobre su etapa en Alianza Lima: "Los dirigentes no me querían ni ver"

Hoy la vida le sonríe a Gabriel Costa. El uruguayo nacionalizado peruano logró el título nacional con Sporting Cristal, fue escogido mejor jugador del Descentralizado 2018 y acaba de dar el gran salto a Colo Colo a pedido de Mario Salas tras una millonaria transferencia.

Sin embargo, Gabriel Costa no la tuvo fácil para ganarse un nombre en el fútbol peruano. Su llegada se dio en el 2014 cuando Guillermo Sanguinetti pidió su contratación en Alianza Lima. Pese al aval de su compatriota, al uruguayo le costó adaptarse a nuestro balompié y su familia era la que más sufría.

"Los primeros meses en Perú me rebotaba la pelota. 40.000 personas me chiflaban. Mi mujer no podía ir a la cancha porque era durísimo. Salimos campeones, de todas formas", detalló Costa a la revista 'Garra'.

"Para el otro campeonato los dirigentes no me querían ni ver. El Topo (Sanguinetti) me bancó a morir, pero me dijo que me quedaba un último partido. Llegué a casa y nos pusimos a llorar con mi señora; no sabíamos qué íbamos a hacer, a dónde íbamos a ir, ella había dejado hasta su trabajo en Montevideo. Jugamos en la altura contra Ayacucho y volé. A partir de ese partido hice goles seis partidos seguidos. Perdimos la final con Cristal 1-0”, abundó.

Pese al alejamiento de su valedor Guillermo Sanguinetti de Alianza Lima a mediados del 2015, Gabriel Costa siguió siendo figura y cuando la dirigencia quiso renovarle el contrato y el uruguayo estaba de acuerdo con las cifras, apareció una llamada que le cambió la vida.

"Terminé yendo a Cristal en 2016 porque me llamó Mariano Soso, el técnico, un tipo que me llegó hasta adentro; con él me iba para la guerra. Es el técnico que quiero tener siempre. Yo estaba negociando con Alianza para renovar y Mariano me convenció: ‘Me voy contigo’, le dije", reveló 'Gaby'.

No obstante, Gabriel Costa y su familia tuvieron que nuevamente hacerse fuertes en la adversidad. "Anduve bien los primeros seis meses en Cristal y me rompí los cruzados. Me dijeron que tenía como para ocho meses, lo que lloramos ese día", sostuvo.

"Le dije a Fernando Gilardi, que me ayudó en la recuperación, que iba a volver en cuatro meses para jugar las finales. Nació mi hijo Benicio y entendí que tenía que recuperarme por él también. Me apoyaron mucho en Cristal. A los cinco meses ya estaba jugando", agregó.

No sería la última lesión grave que sufriría Gabriel Costa, cuyo fútbol dio un salto de calidad cuando Mario Salas se cruzó en su camino. El 'Comandante' supo potenciar al hoy peruano, que anotó 26 goles y dio 19 asistencias para ser clave en el título nacional de Sporting Cristal. De paso, el chileno lo llevó con él a Colo Colo, el gran reto de su carrera deportiva.

Gabriel Costa anotó 27 goles en 84 partidos con Alianza Lima entre 2014 y 2015.