No hubo Salvador en la Selección Peruana [VIDEO]

Denis Prince

El fútbol es la ciencia de lo impredecible, la teoría de lo INDESCIFRABLE, el dogma de lo ilógico, y todo ello nos sucedió ayer en Washington. La Selección Peruana, en un partido de trámite ERRÁTICO, cayó ante El Salvador y atrajo nuevamente los fantasmas que se creían superados. 

Perú, como ante Paraguay, salió intenso los primeros minutos y las ocasiones de gol aparecieron. La de Reyna fue la primera y tras ella llegaron varias más antes del descanso. El propio Yordy tuvo un par de ocasiones más pero la falta de categoría le pasó factura. 

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Carrillo y Advíncula tuvieron sus ocasiones pero el destino fue el mismo y la sensación también. El gol estaba al caer, pero ¿cuándo? Los minutos pasaban, los centroamericanos ganaban en confianza al ver su valla virgen y la desidia de los dirigidos por Gareca se acrecentaba. 

El complemento repitió la dinámica de la primera parte aunque esta vez con menos claridad y más infortunio. El Salvador solo había rematado con dirección al arco una vez, pero ya ganaba gracias al autogol de Trauco. 

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El segundo de Cerén fue la estocada, el golpazo para hacernos ver que sin goles no hay supremacía por más favoritismo que tengas y que cuando no reaccionas tú mismo te terminas ganando. Es la doctrina del fútbol y ahora la sufrimos. Hacer memoria de quiénes somos -y de dónde venimos- nos permitirá volver a entenderla.