¿En el lugar de los hechos?

Desde la época de Alberto Beingolea y su proyecto Goles en Acción en 1991 y el programa deportivo ONCE en América TV con Umberto Jara en 1998 que los periodistas deportivos no se animan por llevar un proyecto propio a la pantalla.

Claro, es mucho más fácil que un canal desarrolle su propio espacio y que los periodistas no nos comprometamos en serio en querer cambiar la historia de una televisión deportiva totalmente futbolizada y asociada con rostros que llevan años diciéndonos por qué Perú no clasifica al Mundial.

El periodista deportivo para empezar no solo habla de fútbol. Debe conocer tanto las reglas del rugby, como las del tenis o del squash. Pero lo más equivocado es entregar gratuitamente nuestra credibilidad.

Si la San Martín es el campeón entonces merece el gran titular sin importar quien es el sponsor o el dueño de los derechos de TV. Si Nicolás Fuchs obtiene el tercer lugar en un Mundial de Rally, no se debe esperar que lleguen las imágenes del jefe de prensa, sino viajar y estar pegado a la llanta si es posible registrando todos los detalles.

Si Sofía Mulanovich gana una nueva fecha del Mundial de tabla, una cámara debería seguirla siempre en cada uno de sus esfuerzos por hacer feliz a los peruanos con sus éxitos. Y ni siquiera en el fútbol.

¿Acaso cuando la San Martín goleó 3-0 a Once Caldas en esta Libertadores hubo una cámara esperándolos en los vestuarios? Esa cámara estuvo en el aeropuerto de ¡Lima! No se trata de dinero, se trata de dar calidad. Por ello, la publicidad paga y rico en la TV.

Basta del gato por liebre y la gráfica bonita para caletear el asunto. Yo lo he vivido en carne propia en 2009 cuando viajé a Italia invitado por Telefónica para estar junto a Juan Manuel Vargas en el propio estadio Artemio Franchi con el ganador de un importante evento deportivo de Asia.

Yo mismo tuve que cargar mi cámara y trípode para poderle hacer con cámara fija una entrevista que fue reveladora por el gran momento que atravesaba el peruano en ese momento en la Fiorentina. Luego viajaron todos los programas periodísticos dominicales cuando esos temas están designados para el campo deportivo. ¿Por qué los periodistas deportivos no podemos pensar de la misma manera? Señores, ese es mi sueño, que se rompan las barreras de la mediocridad y el conformismo.