El país de Sudamérica con la moneda más estable, que atrae la inversión de China y Estados Unidos

Sudamérica se ha vuelto un objetivo importante para inversiones de las grandes potencias, entre ellas, la rivales de nuestros tiempos: China y Estados Unidos. Sin embargo, existe un país de esta región del mundo cuya estabilidad en su moneda se vuelve un destino ideal para realizar diversos proyectos de envergadura.

En esta ocasión, estamos hablando de Perú, el país sudamericano con salida al océano Pacífico que ha sido por décadas un aliado importante para los Estados Unidos, pero que recientemente se ha consagrado como un socio vital para China, que ve en el país andino la puerta de entrada para sus productos.

Y es que la garantía de una moneda estable la da el actual Banco Central de Reserva (BCR), el cual tiene la función de regular la moneda, además del crédito del sistema financiero, administrar las reservas internacionales a su cargo, emitir billetes, monedas, entre otros.

Y esta función e independencia se ha mantenido así desde hace décadas y más aún en los últimos años evitando que el poder político interfiriera, sobre todo en las constantes crisis a nivel político que atraviesa, ya que desde 2016 hasta 2024 los peruanos han tenido 6 presidentes.

Todo esto, es decir, la estabilidad monetaria y una adecuada política fiscal hacen que estas dos potencia mundiales vean en Perú un lugar atractivo para sus inversiones, haciendo a la vez del país andino un actor a tener en cuenta en el escenario geopolítico mundial, donde China y Estados Unidos se juegan la hegemonía global.

Para condensar lo dicho arriba, recurramos al Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial (IEDEP) de la Cámara de Comercio de Lima (CCL), la cual afirma que la moneda peruana, el sol, es de las más estables, y no solo de Sudamérica, sino del planeta entero.

De hecho, las buenas relaciones políticas y comerciales con China, han logrado que el gobierno del presidente Xi Jinping haya firmado con su homólogo peruano el acuerdo para construir el Puerto de Chancay, obra que debería ser estrenada en 2025 y cuya inauguración, se vocea, contaría con la presencia del líder chino. 

Esta obra tiene por objetivo que barcos de gran tonelaje descarguen sus productos (venidos de China) en Chancay como puerta de entrada al resto de Sudamérica.

A esto, debemos sumar proyectos inmobiliarios, la Carretera Central, el llamado del gobierno a empresas chinas para que inviertan en tecnología en el país, principalmente, en redes de Internet, solo por nombrar algunos.