El 17 de junio se informó que la Línea Nacional de Prevención del Suicidio 988 dejará de operar para el colectivo LGBTQ+ a partir de esta fecha en julio.
En un claro ejemplo abuso de poder por parte del gobierno de Donald Trump, la Susbtance Abuse and Mental Health service Administration (SAMHSA), informó que la opción especializada de la Línea Nacional de Prevención del Suicidio 988 dedicada exclusivamente a jóvenes LGBTQ+ dejará de funcionar a partir del 17 de julio.
Esta sección, accesible marcando la opción 3 en llamadas o enviando 'PRIDE' por mensaje de texto, brindaba atención personalizada a uno de los grupos más vulnerables a la crisis de salud mental en Estados Unidos. En esta nota te comentamos la razón detrás de su suspensión y qué críticas trajo esta medida.
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A pesar de que SAMHSA ha expresado que el cambio busca "no aislar más los servicios" y ofrecer un enfoque más uniforme para todos los usuarios, diversos medios de comunicación han explicado que esta medida se relaciona con la propuesta presupuestaria para 2026 impuesta por el presidente Donald Trump, que contempla eliminar el financiamiento para servicios específicos destinados a jóvenes LGBTQ+.
Según voceros oficiales del gobierno federal, estas opciones representan una "ideología de género radical" supuestamente promovida sin el conocimiento de los padres.
La decisión ha sido criticada por organizaciones de derechos civiles y profesionales de la salud mental. El Proyecto Trevor, que operaba el servicio LGBTQ+ dentro del 988, alertó sobre el impacto perjudicial que tendrá este recorte en jóvenes en situación de vulnerabilidad, particularmente durante el Mes del Orgullo.
El director ejecutivo de la organización, Jaymes Black, denunció la medida como "incomprensible" y políticamente motivada: "La prevención del suicidio se trata de personas, no de política". Además, se recuerda que este servicio fue creado tras una ley bipartidista del Congreso, firmada por Trump durante su primer mandato, la cual está destinada a brindar apoyo especializado a poblaciones de alto riesgo, como jóvenes LGBTQ+, comunidades rurales y nativos africanos.
