La licencia AB 60 en California puede ser suspendida si se acumulan puntos, infracciones graves o delitos de tránsito. Migrantes deben cumplir reglas estrictas.
En California, miles de migrantes indocumentados cuentan con una licencia de manejo gracias a la ley AB 60, vigente desde 2015. Este beneficio permite conducir de manera legal siempre que se acrediten identidad y domicilio en el estado, sin necesidad de comprobar estatus migratorio. Sin embargo, no todo es permanente: el Departamento de Vehículos Motorizados (DMV) puede suspender o revocar la licencia en casos graves.
Aunque el programa AB 60 fue creado para dar mayor seguridad vial y proteger a las comunidades migrantes, las autoridades recalcan que no constituye un “permiso especial”. Las personas que acceden a este derecho deben acatar las mismas normas de tránsito que cualquier ciudadano estadounidense, de lo contrario pueden perderlo definitivamente.
Según el DMV, un conductor es considerado negligente cuando acumula más de los puntos permitidos en su historial:
Cada infracción, accidente con responsabilidad o violación de tránsito se suma al registro del automovilista. Superar esos límites implica la suspensión automática de la licencia, incluso para quienes cuentan con el permiso AB 60.
Migrantes con licencia AB 60 en California deben cumplir las mismas reglas que cualquier conductor para evitar sanciones y suspensiones.
El manual del DMV detalla que manejar bajo los efectos del alcohol o las drogas, participar en carreras ilegales, huir de un accidente con víctimas o evadir a la policía son faltas que provocan la pérdida inmediata de la licencia. En casos de lesiones graves, la sanción puede escalar hasta siete años de prisión.
Las autoridades también advierten que reincidir en este tipo de conductas puede cerrar por completo la posibilidad de volver a obtener una licencia en el futuro. Incluso, ciertos delitos asociados al manejo pueden derivar en la cancelación definitiva del permiso, acompañada de procesos judiciales y penas de cárcel.
Cuando el DMV aplica una sanción, el conductor recibe una notificación formal por escrito. Desde ese momento, dispone de 10 días para solicitar una audiencia administrativa. En ese proceso, se pueden presentar testigos, documentos y la defensa de un abogado.
Además, otras faltas como no presentarse en la corte tras recibir un ticket, permitir que un auto sea conducido por alguien sin licencia, circular con placas ilegibles o usar pantallas visibles para el conductor que no sean de navegación, también pueden motivar sanciones severas.
En resumen, aunque la licencia AB 60 es una herramienta que da seguridad a los migrantes, mantenerla vigente depende del estricto cumplimiento de las leyes de tránsito en California.