Donald Trump intensifica la presencia federal en cinco ciudades de EE. UU., desplegando redadas y operativos que generan pánico entre los inmigrantes.
La administración de Donald Trump ha intensificado su política de control federal y redadas migratorias en varias ciudades del país, generando preocupación entre comunidades de inmigrantes en Estados Unidos. Las recientes operaciones han incluido el despliegue de tropas, agentes del ICE y Guardia Nacional, afectando la vida cotidiana de miles de familias.
Estas acciones, que forman parte de la nueva ofensiva de la Casa Blanca contra la inmigración irregular, se concentran en cinco grandes urbes estadounidenses, donde el impacto social, económico y emocional ha sido significativo. A continuación, te contamos cómo se vive la situación en Chicago, Los Ángeles, Washington D. C., Portland y Memphis.
En la ciudad de Chicago, las operaciones del ICE se han intensificado bajo el programa "Operación Midway Blitz", con cientos de arrestos y redadas en vecindarios latinos. Las calles del centro se han llenado de manifestantes que denuncian abusos migratorios, uso de gases lacrimógenos y violencia por parte de agentes federales.
En la ciudad de Chicago, las operaciones del ICE se han intensificado.
Las autoridades locales y defensores de derechos humanos aseguran que los inmigrantes detenidos no representan una amenaza pública, mientras que la administración Trump insiste en que se trata de una medida necesaria para "proteger a los estadounidenses". La tensión entre el Gobierno federal y los líderes estatales continúa en aumento.
En Los Ángeles, los operativos migratorios han provocado caos y miedo. Tras varias redadas en empresas y barrios latinos, las autoridades del condado declararon un estado de emergencia, denunciando que la presencia del ICE ha afectado escuelas, hospitales y pequeños comercios.
El gobernador de California y los líderes locales acusan a Trump de usar tácticas "excesivas" que han paralizado la economía regional. Mientras tanto, miles de familias inmigrantes viven en la incertidumbre, evitando salir de casa por temor a ser detenidas o deportadas.
En Los Ángeles, los operativos migratorios han provocado caos y miedo.
Washington D. C. se ha convertido en uno de los principales focos de la ofensiva federal. En la capital, tropas de la Guardia Nacional y agentes del gobierno han establecido retenes y puntos de control, generando protestas y denuncias por presunto perfilamiento racial.
A este operativo se suman Portland y Memphis, donde el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) mantiene una fuerte presencia. Aunque la Casa Blanca asegura que estas acciones buscan reforzar la seguridad y aplicar la ley, organizaciones civiles denuncian que solo incrementan el miedo y la desconfianza entre las comunidades inmigrantes.