¡Alerta migrante! Donald Trump planea imponer multas de US$998 por cada día de permanencia ilegal

Donald Trump decidió imponer un nuevo obstáculo económico a los inmigrantes. Según los detalles revelados, estas multas se aplicarían retroactivamente, afectando a miles de personas que ya están en el proceso de ser deportadas. La propuesta no solo pretende generar una presión económica sobre los migrantes, sino también intimidar a aquellos que se encuentran en el país de manera ilegal y que, según el gobierno, se negaron a cumplir con las órdenes de deportación.

Este tipo de políticas se convirtieron en una de las características del mandato de Trump en el manejo de la inmigración. Sin embargo, esta nueva propuesta de multas generó controversia, pues se considera que podría agravar aún más la situación de las familias migrantes, muchas de las cuales ya enfrentan condiciones de vulnerabilidad.

Lo que es aún más alarmante es que se plantó la posibilidad de que, si los migrantes no pueden pagar estas multas, el gobierno podría proceder a la confiscación de propiedades. Esta estrategia, que se retrotraería hasta cinco años, podría resultar en multas que superen el millón de dólares, lo que haría aún más difícil para los migrantes regularizar su situación o, en algunos casos, pagar las multas impuestas.

Esta política está vinculada a una ley de 1996, que se aplicó por primera vez durante el primer mandato de Trump. En ese entonces, el gobierno empezó a aplicar sanciones económicas a migrantes en situaciones similares, como aquellos que buscaban refugio en iglesias. Sin embargo, debido a la oposición de la comunidad migrante y activistas, las sanciones se retiraron parcialmente, pero ahora parecen estar resurgiendo con más fuerza.

Un alto funcionario de ICE, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos, bajo la administración de Joe Biden se mostró escéptico sobre la implementación de estas multas y confiscaciones. Según declaraciones de Scott Shuchart, estas sanciones son más un intento de intimidación que una medida de cumplimiento de la ley. Shuchart sostuvo que las multas no se tratarían tanto de hacer cumplir la ley, sino de generar miedo en las comunidades migrantes.

La posibilidad de que las multas se apliquen a los migrantes, incluso a aquellos que viven en "hogares de estatus mixto", donde residen tanto ciudadanos estadounidenses como migrantes sin papeles, es una fuente importante de preocupación. Esto podría afectar no solo a los migrantes, sino también a sus familias y a otros residentes legales.

Sin embargo, algunos especialistas en derechos humanos argumentan que este enfoque es excesivo y que las políticas de Trump van en contra de principios fundamentales de justicia y humanidad. A medida que estas nuevas propuestas continúan tomando forma, se espera que haya más disputas legales y sociales en torno a su aplicación.