La Sensei María Martínez vuelve a dar un golpe, pero esta vez en busca de la igualdad. Y es que ella fue elegida por unanimidad este miércoles como nueva presidenta de la Federación Peruana de Judo, siendo la primera mujer en ocupar dicho cargo en la historia del ente.
Martínez, quien a la fecha se desempeña como jefa de la unidad técnica de la federación, incursionó en el campo de la dirigencia deportiva con el fin de continuar la gestión que se inició hace siete años con Carlos Zegarra en la presidencia. Ahora tomará las riendas de la Federación durante los siguientes cuatro años.
PUEDES VER Carlos Zegarra: “Los deportistas saben que no pueden flexibilizar el cuidado de su salud”
La nueva directiva presidida por Martínez buscará impulsar aún más el trabajo de masificación, así como el reconocimiento del judo como tal, a través la labor descentralizada y el mejoramiento de las condiciones tanto para el alto rendimiento como en la captación de nuevos valores.
La tarea de María Martínez será importante debido ya que en esta etapa se buscará obtener más resultados internacionales, siendo el objetivo más importante y cercano los Juegos Olímpicos Tokio 2021.
“Estoy muy agradecida por el respaldo de los clubes y a la vez nerviosa por la nueva labor que me tocará asumir desde enero; sin embargo, me impulsa y entusiasma el reto de seguir avanzando en el desarrollo del judo peruano. Que tanto en Lima como en el interior del país se tengan todas las condiciones técnicas y de infraestructura para que los deportistas entrenen sin preocupación y conscientes de todo lo que pueden hacer a través del deporte”, aseguró la presidenta electa.
La capacitación y la profesionalización también son tarea importante que espera sostener la directiva que estará compuesta por el recientemente retirado judoca Frank Alvarado en la vicepresidencia, Miguel Pazos (secretario), Antuane Borjas (tesorera) y las vocales Jazmín Frisancho, Brunilda Calla y Lilia Culqui.
La nueva junta directiva entrará en funciones en enero del próximo año y estará vigente por el próximo ciclo olímpico que culminará con los Juegos de París 2024.
“Esperamos, en un futuro no muy lejano tener la posibilidad de disputar una medalla olímpica. Creemos que el judo peruano tiene muchísimo potencial y cada vez hay más personas practicándolo en todo el país, de allí han de seguir saliendo los atletas”, sentenció la flamante directiva.