Despidos en EE. UU. se disparan por adopción de IA y cierre del Gobierno; octubre registra el aumento más alto en más de 20 años.
Los anuncios de despidos en empresas estadounidenses se dispararon en octubre, alcanzando cifras históricas que no se veían desde 2003. La adopción de inteligencia artificial (IA) y la moderación del gasto de consumidores y empresas son algunos de los factores que explican esta tendencia, según el informe de Challenger, Gray & Christmas.
El aumento de despidos refleja un mercado laboral en transformación, donde la automatización y la IA están cambiando la manera en que las compañías operan. Grandes empresas, como Amazon y Target, han vinculado sus recientes recortes de personal directamente al impacto de estas tecnologías disruptivas.
En octubre se anunciaron más de 153.000 despidos, un incremento del 175 % respecto al mismo mes del año pasado y el mayor aumento para un mes de octubre desde 2003. En total, los recortes superan el millón en los primeros diez meses del año, un crecimiento del 65 % comparado con el año anterior.
Despidos en EE. UU. se disparan por adopción de IA y cierre del Gobierno.
Expertos destacan que la inteligencia artificial no solo está transformando procesos, sino también generando ajustes laborales significativos. Empresas tecnológicas y minoristas han explicado que la automatización de tareas y la eficiencia operativa impulsada por la IA ha llevado a la reducción de puestos de trabajo, marcando un cambio estructural en la economía.
El análisis del mercado laboral se ha complicado debido al cierre del Gobierno de EE. UU., el más largo de la historia. Los informes oficiales de empleo, como el de septiembre y octubre, no se han publicado, lo que dificulta la evaluación precisa del desempleo y del crecimiento de nóminas.
Ante la ausencia de datos oficiales, economistas e inversores recurren a fuentes alternativas, como los informes privados de nóminas de ADP y el informe de Challenger.
Sin embargo, autoridades como el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, han advertido que estos datos no reemplazan el "patrón de oro" del Gobierno y que la falta de información podría complicar la política monetaria y futuros ajustes de tasas de interés.