Autoridades alertan lluvias intensas que podrían multiplicar por seis el promedio mensual en varias ciudades de Texas, elevando el riesgo de inundaciones.
Una fuerte inyección de humedad empujada por un sistema frontal activó alertas de inundación para más de 3,5 millones de personas en el centro de Texas desde la noche del miércoles 19 de noviembre. Los meteorólogos advirtieron que varias ciudades podrían recibir en cuestión de horas lluvias que superen ampliamente todo el promedio mensual de noviembre, lo que eleva el riesgo de calles anegadas, drenajes saturados y corrientes repentinas, según reportes del Servicio Meteorológico Nacional (NWS) y la NOAA.
De acuerdo con Newsweek, las oficinas NWS Austin/San Antonio y NWS San Angelo emitieron vigilancias especiales para múltiples condados, entre ellos Austin, San Antonio, Del Río, Uvalde, Llano, Brady e Indian Creek. Las proyecciones apuntan a acumulados de hasta 15 centímetros de lluvia entre la noche del miércoles y la noche del jueves, cifra muy por encima de los registros históricos. Las advertencias permanecen activas y podrían intensificarse conforme avancen las tormentas.
Residentes observan el avance del agua mientras continúan las alertas meteorológicas.
El promedio histórico de noviembre en ciudades como Del Río ronda los 2,3 centímetros de precipitación, según datos de la NOAA. Sin embargo, el episodio actual podría duplicar, triplicar o incluso multiplicar por seis esa cantidad en menos de 24 horas. Esta combinación de intensidad y rapidez es poco habitual para la región y es lo que ha llevado a las autoridades meteorológicas a reforzar las previsiones.
Las vigilancias emitidas abarcan desde la noche del miércoles 19 hasta el jueves 20 de noviembre, con posibilidad de extenderse según evolucione el sistema frontal. Las áreas con mayor peligro inmediato son Austin y San Antonio, seguidas por una franja de ciudades en el centro y oeste de Texas. El NWS advirtió que los acumulados previstos podrían igualar o superar el total de un mes entero, con potencial para establecer nuevos récords de precipitación.
Según los reportes oficiales, el área bajo vigilancia incluye:
El NWS señaló que el exceso de escurrimiento podría provocar inundaciones en arroyos, zonas bajas y cruces viales de poca elevación.
Las cifras publicadas por NOAA y NWS muestran la magnitud del riesgo:
Estos valores son superiores tanto a la media mensual como a lluvias recientes registradas en la misma temporada, lo que refuerza el potencial de desbordamientos repentinos.
El exceso de agua en tan poco tiempo puede generar:
FEMA y el NWS reiteran que muchos de los incidentes graves ocurren cuando los conductores intentan cruzar corrientes de agua. Las autoridades recomiendan suspender desplazamientos innecesarios durante los picos de lluvia.
Las agencias federales actualizarán los reportes conforme avance el sistema de tormentas. Entre las sugerencias más importantes:
El NWS y FEMA coinciden en que el acceso a información confiable reduce significativamente los riesgos.
Las intensas lluvias afectarán desplazamientos, servicios esenciales y la rutina de miles de residentes en al menos ocho ciudades de Texas. La zona de alerta podría ampliarse a medida que el sistema frontal avance hacia el este. Las autoridades monitorean en tiempo real los registros para determinar si las vigilancias deben escalar a advertencias o avisos urgentes.
Los acumulados que se registren en las próximas 24 horas servirán como referencia para reforzar futuras estrategias de prevención y gestión de inundaciones en la región, según los primeros reportes de la NOAA y el NWS.
Las autoridades insisten en que la preparación previa es clave para reducir riesgos durante tormentas inusualmente intensas. La población puede reforzar medidas simples como revisar desagües domiciliarios, asegurar objetos en exteriores y mantener cargados dispositivos de comunicación.
A la par, los gobiernos locales evalúan mejoras en drenajes, ampliación de sistemas de alerta y capacitación continua de equipos de emergencia para responder con rapidez ante eventuales inundaciones urbanas.