La autoridad federal detectó un diseño peligroso que podría facilitar el acceso de menores al agua sin supervisión.
La seguridad infantil volvió a encender las alarmas en Estados Unidos. La Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor de Estados Unidos (CPSC) ordenó el retiro inmediato de más de 13.000 piscinas elevadas tras identificar una falla estructural que incrementa el riesgo de ahogamiento en niños.
La advertencia, difundida el 18 de diciembre de 2025, alcanza a modelos comercializados a nivel nacional durante los últimos cuatro años. El organismo federal advirtió que el problema no es menor: un componente externo del diseño puede funcionar como “escalón”, permitiendo que los menores trepen la piscina sin la intervención de un adulto.
Autoridades piden actuar de inmediato para proteger a los niños.
El retiro involucra principalmente a piscinas de las marcas Blue Wave y SereneLife Home, ambas de gran presencia en el mercado estadounidense. En total, se contabilizan más de 13.400 unidades de Blue Wave y unas 80 de SereneLife Home, todas con alturas iguales o superiores a 1,22 metros. Estos productos se vendieron tanto en tiendas físicas como en plataformas digitales de alto alcance entre 2021 y 2025.
Según la CPSC, la falla se encuentra en una correa de refuerzo que rodea la estructura exterior de la piscina. Aunque su función es aportar estabilidad, en la práctica puede convertirse en un punto de apoyo que facilita el acceso de los niños al interior, incluso sin escalera instalada. Las autoridades subrayaron que este tipo de diseño reduce las barreras de protección y aumenta significativamente el peligro cuando no hay supervisión constante.
Si bien no se registraron incidentes recientes con estos modelos específicos, la comisión recordó que, en los últimos 15 años, al menos nueve muertes infantiles estuvieron relacionadas con fallas similares en piscinas elevadas. Desde la CPSC remarcaron que el ahogamiento continúa siendo una de las principales causas de muerte accidental en menores de cinco años, según datos del Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
La recomendación es clara: dejar de usar inmediatamente las piscinas incluidas en el retiro.
Hasta completar el proceso, la CPSC aconseja vaciar las piscinas o impedir totalmente el acceso de niños.
La medida obliga a los principales minoristas y tiendas online a retirar estos productos de sus catálogos y atender los reclamos de los clientes. La comisión destacó que el proceso de reparación o reembolso no tiene costo para los consumidores. La CPSC explicó que este retiro busca prevenir tragedias evitables y reforzar los estándares de seguridad en productos de uso familiar. El organismo adelantó que continuará intensificando los controles sobre artículos domésticos que representen riesgos para niños.