En menos de cinco días Telegram en Brasil pasó de estar prohibido a poder seguir con sus operaciones. El pasado viernes 18 de marzo, desde la Corte Suprema, el juez Alexandre de Moraes ordenó la suspensión de dicha app, tras no cooperar con la ajusticia a la hora de responder sobre ciertos perfiles vinculados a Jair Bolsonaro.
La decisión de la justicia brasileña ocurrió a raíz de que Telegram, plataforma de mensajería frecuentada por el presidente de Brasil Jair Bolsonaro, y sus aliados, no respondiera a las órdenes judiciales de bloquear ciertas cuentas que difundían desinformación, así informó el medio TV Globo.
Ahora, el mismo juez revirtió el domingo su propia decisión. "Considerando que se atendieron integralmente" las solicitudes del tribunal, "revoco la decisión de suspender completa e integralmente el funcionamiento de Telegram en Brasil", escribió Moraes en un documento divulgado por el STF.
Grupos del bolsonarismo se trasladaron a Telegram luego de que lo hiciera el presidente Bolsonaro, quien fue blanco de censura de contenidos por parte de Facebook y Google, tras haber mentido sobre información del coronavirus.
La Justicia electoral activó dichas acciones para monitorear las noticias falsas a tan solo meses de la campaña presidencial para las elecciones este 2 de octubre del 2022.
El fundador de Telegram, Pavel Durov, de origen ruso, pidió disculpas a la corte suprema y dijo que los incumplimientos que motivaron el bloqueo fueron por "problemas de comunicación", pidiendo más tiempo para atender las órdenes judiciales y evitar el bloqueo.