Alianza, al estilo de Bengoechea, venció a Melgar y jugará la final con Cristal [CRÓNICA]

Denis Prince Delgadillo

La Alianza que Bengoechea tiene con su plantel es a prueba de todo; a prueba de limitaciones, a prueba de rivales colectivamente superiores, a prueba hasta de jugadas polémicas. Y esa Alianza está sellada con el corazón.  

Solo así, quizás, se pueda explicar la convicción del “Profesor” para apostar, ante la sorpresa de todos, por Mario Velarde y Janio Pósito. Dos jugadores relegados a ver la última recta del campeonato casi siempre fuera de la cancha. 

Ayer los dos se redimieron. Principalmente, Janio, ese “9” con pinta de ciudadano de a pie, aquel que madruga para trabajar, ese peruano que se esfuerza para seguir creciendo en medio de las pocas posibilidades que el sistema le ofrece, pero que cuando la tiene demuestra estar más que capacitado.

Sus dos cabezazos fueron la ratificación de que el planteamiento de Bengoechea era el idóneo. Aguantar los embates mistianos y pegar en las pocas que tuviesen. Así adelantó a Alianza y así llevó el partido a la definición por penales, luego de que el árbitro no cobrase un gol legal de “Canchita” Gónzales.

Pero allí también estuvo el corazón, para “hacer” que la terna arbitral mostrase su lado más humano y para luego capitalizar al máximo las ocasiones que generó.

En la tanda Leao se volvió a hacer incólume y metió la mano un par de veces para llevar a la blanquiazul a una nueva final. Enfrente estará Cristal, otro rival colectivamente superior, pero para la Alianza de Bengoechea a estas alturas nada es imposible.